¿Cómo reconocer a un falso profeta?

Queridos amig@s! como ya saben nuestros lectores, en este espacio creemos en los dones espirituales y conocemos por experiencia un poco de lo que es el mundo sobrenatural.

Cuanto más conozco de el, más complicado descubro que es el mundo sobrenatural, y lo más aterrador es descubrir la cantidad de "milagros" y "señales" que hace el demonio para confundir, dividir y dañar a las buenas personas.

Es increíble la cantidad de fenómenos inexplicables que suceden a lo largo y ancho del mundo. Estamos seguros y esto es gracias a la Biblia y al conocimiento que tenemos de Dios, de que muchos de estos fenómenos extraordinarios no proceden más que de fuerzas oscuras.

Lo más interesante es que incluso los lideres, los políticos y las elites saben que en nuestro mundo se libra una batalla espiritual... intentan disimular y ocultar las pruebas o no darle la importancia que tienen estos fenómenos sobrenaturales...

Estas personas no temen al Señor, solamente quieren que todo siga igual porque les incomoda un cambio espiritual que derribaría sus privilegios y el control que tienen sobre una población mundial que esta aletargada y vive en ignorancia.

Estamos seguros de que Dios obra con poder en su iglesia, estamos seguros de que cada día el Señor a través de sus pastores y ministros hace milagros de diferente naturaleza en las personas que reciben la Palabra y quieren seguir a Cristo.

También sabemos que el demonio se infiltra en las iglesias y crea falsas doctrinas también crea otras religiones para disfrazar de piedad lo que nos aleja de la verdad que esta en Cristo.

Hay muchas personas influenciadas por el maligno que engañan y hacen daño, por ese motivo hoy les quiero compartir unos consejos para diferenciar una falsa profecía y a un falso profeta, pues últimamente aparecen profetas hasta debajo de las piedras.

Como cristianos nacidos de nuevo, necesitamos hoy la operación de los dones del Espíritu Santo en nuestras iglesias. Debemos avivar cada llama de fuego que proviene de Dios, pero también debemos darnos cuenta de que hay dones verdaderos y falsos.

Los creyentes pueden aprender a distinguir entre dones verdaderos y falsos. No es necesario que nos dejen a oscuras con respecto a nada; ¡la Biblia nos ilumina!

Incluso se nos dice que podemos juzgar profecías y profetas. ¿Cómo? La Biblia da algunos pasos para juzgar la profecía. Hoy por cuestión de espacio les mostrare el paso más evidente.

A este paso le llamamos: "Por sus frutos los conoceréis".

Jesús advirtió contra los falsos profetas, diciendo: "Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con piel de oveja, pero por dentro son lobos rapaces" (Mateo 7:15).

Pablo y Pedro, al escribir a la Iglesia Primitiva, también advirtieron contra los falsos profetas, los falsos apóstoles y las falsas profecías:

2 CORINTIOS 11:13-15
13 Porque éstos son falsos apóstoles, obreros engañosos, que se disfrazan como apóstoles de Cristo. 14 Y no es maravilla; porque el mismo Satanás se transforma en ángel de luz
15 Así que, no es extraño si también sus ministros se disfrazan como ministros de justicia; cuyo fin será conforme a sus obras.

2 PEDRO 2: 1-3
1 Pero también hubo falsos profetas entre el pueblo, así como habrá falsos maestros entre vosotros, que en secreto introducirán herejías condenables, incluso negando al Señor que los rescató, y traerán sobre sí mismos destrucción rápida.
2 Y muchos seguirán sus perniciosos caminos; por causa de los cuales se hablará mal del camino de la verdad.
3 Y por avaricia harán mercadería de ti con palabras fingidas: cuyo juicio ya desde hace mucho tiempo no se demora, ni se adormece su condenación.

Si tal advertencia era necesaria para la Iglesia Primitiva, es necesaria hoy. (Creemos y practicamos lo que escribieron entonces sobre la Cena del Señor, el bautismo en agua y otras cosas. ¿Por qué no creer y practicar lo que dijeron sobre estos casos?)

Jesús es el que da esa advertencia contra los falsos profetas en Mateo 7. ¿Sabe Él de lo que está hablando? Creo que lo hace. Creo que la gente de hoy necesita Su advertencia.

Como vimos, describió a los falsos profetas como si vinieran a ti "con piel de oveja, pero por dentro son lobos rapaces" (v. 15). Parecen muy humildes, muy mansos, como el resto de las ovejas. No se puede decir por su apariencia exterior que son lobos voraces.

Pero Jesús dijo que hay una manera de conocerlos. ¿Cómo? "Por sus frutos los conoceréis", dijo Jesús. "¿Acaso se recogen uvas de los espinos, o higos de los abrojos? Así, todo buen árbol da buenos frutos, pero el árbol malo da frutos malos.” (vv. 16,17).

Continuó: "Un buen árbol no puede dar malos frutos, ni un árbol malo dar buenos frutos. Todo árbol que no da buenos frutos es cortado y echado en el fuego. Por tanto, por sus frutos los conoceréis". (vv. 18-20).

¿Qué es un buen fruto? cualquier enseñanza que no contradiga lo que esta escrito en la Biblia sobre Jesús, los apóstoles y lo que nos enseñaron estos en la sagradas escrituras. Otras "revelaciones" y teologías que no aparecen en la Biblia son inventos de estos "profetas" .
Un buen fruto es también cuando recibes un consejo de alguien y este consejo realmente te ayuda y no ha perjudicado tu fe ni  contradice las enseñanzas de la sana doctrina bíblica.
Un buen fruto es también cuando recibes sanación u otro tipo de ayuda espiritual por la intercesión de un pastor o ministro y este da la gloria y el merito a Dios con humildad en vez de crecerse y enorgullecerse de si mismo. 
Un buen fruto es recibir palabra profética y que esta se cumpla sin que la persona que la recibe tuviera que romper las normas de comportamiento que nos enseña la sana doctrina bíblica. 
Este punto es importante y hay que ponerle atención porque una falsa profecía es fácil de comprobar, nunca se cumple, pero muchas profecías que se cumplen son dadas por malos espíritus para conseguir llevar su mensaje y dotar de autoridad a falsos profetas que pueden contaminar a buenas personas.
Para diferenciar un espíritu de profecía malo de uno bueno hay una regla:
Toda profecía se da para ayudar al creyente a mejorar su relación con Dios, como por ejemplo dar ánimos, valor... estas profecías buenas te ayudaran a afirmar tu fe y abandonar malos caminos. Están destinadas a la conversión genuina y al arrepentimiento. Una falsa profecía exalta al hombre y al profeta en vez de exaltar la fe, o la sana doctrina bíblica y a Dios.
También hay "profecías buenas" de llamado evangélico, es decir el profeta recibe el mensaje de que una persona tiene que dedicarse a evangelizar a otras porque tiene dotes para hacerlo. Esta persona que recibe la profecía quizás por humildad nunca se atrevió a pensarlo y necesitaba una señal o un impulso ya sea para hacerse predicador o para viajar a otros lugares y dar testimonio allí.
Estos llamados siempre tendrán éxito confirmando así que era una profecía autentica porque Dios nunca se equivoca. Él conoce todo lo que fue y será.





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