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Mostrando entradas de agosto, 2023

Reflexión para hoy.

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Queridos amig@s! ¿Qué es una negligencia? En el diccionario encontramos su definición: "Falta de cuidado, aplicación y diligencia de una persona en lo que hace, en especial en el cumplimiento de una obligación.  Error o fallo involuntario causado por esta falta de atención, aplicación" Nuestro Señor Jesucristo nos advirtió de que necesitamos estar atentos, a veces en lo cotidiano dejamos de prestar atención y es entonces cuando cometemos esos pequeños errores que a veces resultan muy difíciles de resolver. También somos negligentes cuando no prestamos atención a nuestros amigos y seres queridos, sin darnos cuenta podemos perder la confianza de ellos porque no estuvimos atendiendo sus necesidades cuando lo requerían. Nos pasa igual cuando perdemos el interés en la oración y en ser correctos en nuestra actitud ante la vida. Son descuidos que pueden costarnos más de lo que creemos. Por este motivo hoy les invito a que presten atención a su actitud. La negligencia más grave que p

Reflexión para hoy.

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Queridos amig@s!  El primer concepto fundamental de la fe, es su relación y dependencia total con la Palabra de Dios (la Biblia). Por esta razón, debemos entender que con las palabras se forman frases e ideas que unidas de manera coherente sustentan un concepto, una idea, que va a nuestro pensamiento, y que al aceptarla como cierta moldea nuestras creencias. Las creencias determinan nuestro comportamiento, pero la Palabra de Dios encierra conceptos mucho más elevados y trascendentales que las ideas humanas; el Señor Jesús lo explica de manera contundente: “El espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida”, (Juan 6:63). La Palabra de Dios hace aquello para lo cual Él la envió, no son simples divagaciones o conjeturas como las hacemos los hombres sino que al ser verdadera, consistente, coherente, poderosa y eterna, todo lo creado obedece a ella (Isaías 55:11, Jeremías 23:29). Entonces, la fe es conducida y alimentada p

La epístola de Tito.

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La c onversión de Tito fue resultado de la predicación de Pablo en Antioquía de Siria. A Pablo debemos también cuanto sabemos acerca del carácter, personalidad y ministerio de aquel amigo y colaborador suyo, al que llama «verdadero hijo en la común fe» ( 1.4 ). El apóstol lo menciona en tres de sus epístolas ( 2 Co. 2.13 ;   7.6-7 , 13-14 ;   8.6 , 16 , 23 ;   12.18 ;   Gá. 2.1 , 3   y   2 Ti. 4.10 ), y le dirige la presente. E l libro de los Hechos, sin embargo, no contiene ninguna referencia a Tito, a pesar de haber sido compañero de Pablo en su viaje a Jerusalén cuando tuvo lugar el llamado «concilio de los apóstoles» ( Hch. 15.4-29 ; cf.   Gá. 2.1 ). Y es seguro que su presencia allí representó un papel relevante en apoyo de las razones de Pedro, Pablo, Jacobo y otros, frente a quienes pretendían que los gentiles, para llegar a ser cristianos, se sometieran antes a la ley mosaica ( Hch. 15.1 , 5 ; cf.   Gá. 2.3 ).  A ndando el tiempo, el apóstol confió a Tito misiones tan delicadas