Reflexión diaria.
Queridos amig@s! Cada vez es más la maldad y el pecado que se halla en este mundo, y como hijos de Dios es muy fácil sentirnos atraídos por lo que nos ofrece este de manera muy sutil, quedando en nuestras manos la decisión de ceder al pecado o alejarnos por completo de él.
En Génesis 13 encontramos la historia de Abraham y Lot quienes tuvieron una discusión porque el espacio que compartían era muy reducido para sus animales, el primero le propuso a su sobrino Lot que se separasen y escogiese él la tierra a la cual se apartaría, y la biblia dice que este fue atraído por las tierras de Sodoma y Gomorra: Génesis 13:10 “Y alzó Lot sus ojos, y vio toda la llanura del Jordán, que toda ella era de riego, como el huerto del Señor, como la tierra de Egipto en la dirección de Zoar, antes que destruyese Dios a Sodoma y a Gomorra. Entonces Lot escogió para sí toda la llanura del Jordán; y se fue Lot hacia el oriente, y se apartaron el uno del otro.”
Pero a pesar de su hermosura y abundancia, estas tierras estaban llenas de hombres pecadores, como sigue el texto en Génesis 13:13“Mas los hombres de Sodoma eran malos y pecadores contra Dios en gran manera.” aun así Lot se estableció en ese lugar totalmente contaminado: “…Lot habitó en las ciudades de la llanura, y fue poniendo sus tiendas hasta Sodoma.” Génesis 13:12
Muchos hoy día son como Lot dejándose seducir por lo que el mundo les ofrece. Aun conociendo la maldad que los rodea, acceden a participar en sus malas obras en lugar de apartarse de ellas, cuando aún la Biblia nos enseña en Efesios 5:11 que debemos huir de las obras de las tinieblas y reprenderlas: “Y no participéis en las obras infructuosas de las tinieblas, sino más bien reprendedlas;”
Si queremos escapar de la condenación eterna, debemos huir de hacer amistad con este mundo. Es imposible que haya comunión con Dios y a la misma vez estemos en tinieblas. Dios les bendiga!