Reflexión diaria.

Queridos amig@s! A menudo escuchamos, leemos y vemos cómo la necesidad oprime a los más débiles, La Biblia a través de muchos de sus textos, nos insta no solamente a pensar, sino también a tener cuidado y brindar ayuda al más necesitado, de manera que así como él nos ha bendecido nosotros también podamos bendecir a otros, así como dice Salmos 82-3 “Defended al débil y al huérfano; Haced justicia al afligido y al menesteroso”. No dudes en extender tus manos en rescate al débil, ni guardes silencio cuando contra él se levanten, es muy común observar cómo la sociedad se ha encargado de despreciar y relegar a lo más bajo a quienes padecen necesidad, lo que no han entendido y que hoy tú ya sabes, es que cuando le brindas ayuda de quienes les hacen daño, entonces Dios te librará a ti en el día de la aflicción. Gálatas 6-10 nos dice “Así que, según tengamos oportunidad, hagamos bien a todos, y mayormente a los de la familia de la fe”, nunca consideres que ya has tenido suficiente de brindar ayuda, y si algún día lo piensas recuerda que la misericordia de Dios para ti, se renueva todos los días, y su ayuda y pronto auxilio está siempre a tu disposición, Dios quiere que a través de tu generosidad se refleje su bendición. Dios les Bendiga!