Reflexión para hoy.
Queridos amig@s! Como cada día les escribo una pequeña reflexión, hoy les comparto este versículo: «Así que, recibiendo nosotros un reino inconmovible, tengamos gratitud, y mediante ella sirvamos a Dios agradándole con temor y reverencia (Hebreos 12:28).» Reflexión: Todos los meses del año son especiales porque en todos ellos recibimos millones y millones de bendiciones que van llenando cada uno de nuestros sentidos, que nos ayudan a crecer física, mental, profesional y espiritualmente.
Cada mes que comienza debemos reflexionar sobre todo lo que hicimos y dejamos de hacer en los meses anteriores, no solo en el plano laboral y personal, sino también el desempeño que tuvimos con nuestros familiares, y el resto de las personas que nos rodean, pues a veces nuestra actitud puede tener un impacto sobre las personas que conviven con nosotros. De igual forma, cuando tenemos un hogar, un esposo o esposa e hijos, también debemos tomar decisiones y proyectos que beneficien a los integrantes de la familia, pero también debemos pensar en nuestras metas personales. Pero otro punto importante a analizar es cómo estuvo nuestra vida espiritual en todos estos meses, ¿qué tiempo le dedicamos a nuestro Padre?, ¿hicimos planes y tomamos decisiones con la guía de Dios? Saquemos tiempo para reflexionar, agradecer y acercarnos más a Jesús y a nuestra familia. Dios les Bendiga!