Reflexión diaria.
Queridos amig@s! Hoy les comparto este versículo bíblico como cada día para reflexionar:
«Confía en el Señor con todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él enderezará tus sendas» (Proverbios 3: 5-6).
Reflexión: Nada es demasiado difícil para Dios, a veces solemos pensar que hay cosas demasiado imposibles, que no son creíbles para nosotros que tengan solución, pero para Dios nada es imposible. Nos sentimos osados por molestar a Dios con semejantes problemas que posiblemente no tengan solución. Pensamos que es muy improbable que Dios nos ayude, siempre pensando con nuestra mente humana bastante limitada. Pero para Dios Creador del cielo y la tierra ¿Habrá algo imposible? Como le escuché a un joven cristiano que había salido de las drogas, “No le digas a Dios qué grande es tu problema, dile a tu problema qué grande es Dios” porque así es, no existe problema más grande que Dios, nada está fuera de su alcance, así que dejemos de ser incrédulos, dejemos de ser hombres de poca fe, y empecemos a confiar en el Señor. Cuando estemos en una situación que no podamos manejar, en una situación en la que no veamos salida, oremos al Señor aunque pensemos que es demasiado atrevido o absurdo pedir por tan grande problema que según nosotros no tiene solución y digámosle “Señor ya no puedo más con esta situación, no puedo manejarlo así que te la entrego, toma Tú el control y si es tu voluntad haz tu obra en mí”. Nuestro Padre de preocupa por nosotros, sabe nuestras necesidades y está dispuesto a guiarnos, Dios siempre nos ayuda aun cuando no se lo pedimos y dudamos, porque nos ama. Descansemos en el Señor, entreguemos nuestras angustias y problemas, Él enderezará nuestros caminos por más imposible que parezca. Dios les Bendiga!