Reflexión para hoy.
Queridos amigos! Como cada día les envío una cita bíblica para hacer una reflexión, espero que les parezca interesante.
En el libro del Apocalipsis Jesús dice: "Yo soy el Alfa y el Omega, el principio y el fin, el primero y el último" (Apocalipsis 22:13).
Reflexión: Jesús es el Gran Yo Soy, pero prestemos vital atención para que no nos confundamos, Jesús no es el Gran “Yo Fui”, es el Gran “Yo Soy”, ¡Amén, alabado sea el Señor! Jesús es un Dios vivo, no es un Dios muerto: Jesús cargó la cruz por todos nuestros pecados y resucitó para que veamos la Gloria y el Poder de Dios. Jesús es el mismo de ayer, de hoy y será el mismo por los siglos de los siglos. El Hijo de Dios llena todas nuestras necesidades, es nuestro amigo, protector, consejero, salvador y nuestro ejemplo a seguir. Jesús está reinando con el Padre, preparando morada para nosotros, porque su sacrificio no fue en vano, nos abrió un abanico de oportunidades que hoy nos permiten optar por una vida eterna. Hablar y estudiar de Jesús es verdaderamente maravilloso porque nos permite ver ese lado humano de Dios, esa perfección, humildad, amor y misericordia, lo que nos permite ver cómo somos amados por Dios. El ejemplo y la vida de Jesús nos transmite confianza para creer en Dios, para creer en Jesús porque no vemos un Dios velando solo por sus intereses, imponiendo todo como un tirano, vemos un Dios que es capaz de entregar a su Hijo para salvar a la humanidad y un Hijo que fue capaz de dar su vida por nosotros, si eso no es amor, entonces ¿qué más lo puede ser?, definitivamente no queda duda de que Jesús es Dios, que su perfección es nuestra lumbrera para encontrar el camino de vida. Dejemos que el Gran Yo Soy obre en nuestras vidas, de verdad que nadie ha hecho lo que Él ha hecho por nosotros y a diario nos sigue brindando su ayuda y amor, no lo rechacemos. Gracias por leer! qué Dios les bendiga!